Cuándo me apunte para esta adventura, sin importar mi sentido común, tenía la extraña idea que viviría un momento increible tras otro, y nada nunca sería aburrido o difícil. La ignorancia es atrevida, ¿no? La verdad, no sé por qué pensé que sería así, la vida tiene patrones y fluctúa entre ritmos cotidianos y lo eterno, entonces quisiera compartir lo cotidiano para que tengan un marco de referencia desde el cual pueden interpretar las ideas eternas en mis blogs.
Lunes-Viernes
Me levanto a las seis para estar al desayuno con todo el escuadrón antes de las seis y media. Después del desayuno, hago mi devocional hasta faltando cuarto para las ocho, cuando salimos en bicicletas para forrar libros en un café/biblioteca que todavía no ha abierto. Ahí junto con mi equipo cortamos y pegamos plástico mientras escuchamos audiolibros o música hasta las once, cuándo recogemos todo y regresamos a la casa. Almorzamos a las doce, limpiamos después del almuerzo y descansamos hasta la una, cuándo volvemos a montar nuestras bicicletas y pedaleamos hasta el hospital de trauma que queda a unos veinte minutos de distancia. Cuando llegamos, intercalamos tiempo de juegos de mesa con los pacientes en las guardas y tiempo para hacer tarjetas para perpetuar los fondos para el programa. Por las cuatro y media, regresamos a la casa y por lo general me quedo en un café con wifi. Regreso a la casa antes de las siete y media cuándo todos cenamos juntos. Por lo general, después de la cena, paso tiempo con mi equipo, e intento acostarme a dormir antes de las diez.
Sábado – Día de aventura
Exploro Battambang con otros, siempre sorprendida de la belleza y la tragedia que encuentro en esta cidudad.
Domingo – Día de reposo.
Descanso y me preparo para los retos de la próxima semana.
When I signed up for this adventure, common sense nonwithstanding, I had the strange notion that I would live one incredible moment after another, and nothing would ever be boring or hard. Looking back, I see how bold my ignorance was! really don’t know why I thought it would be like that, real life has patterns, and fluctuates between daily rythms and eternal ideas, so I would like to share daily life so that you can have a point of reference from which you can interpret the eternal ideas in my blogs.
Monday- Friday
I wake up at six to be at breakfast with the squad before six-thirty. After breakfast, I do devos until a quarter to eght when we go out on bikes to cover books at a coffee shop/library that hasn’t opened yet. Alongside my team, we cut the plastic while we listen to audiobooks or music until eleven when we clean up and go back home. We have lunch at twelve, clean up, and rest until one, when we mount our bikes again and pedal to the trauma hospital about twenty minutes away. When we arrive, we switch off betwen playing games with the patients in the wards and making cards to sell and fund the program. Around four-thirty, we go back hom and I generally stop at a coffee shop with wifi. I go back home before seven-thirty when we all have dinner together. We usually have team time after dinner, and I try to go to bed before ten.
Saturday- Adventure Day
I explore Battambang with at least one other person, and am always surprised by the beauty and tragedy I find in this city.
Sunday – Rest day
I rest and prepare for the challenges of the next week.
