New Hope Church (el lugar donde estamos, que es una iglesia-orfanato) posee un terreno grande donde se quiere levantar un nuevo orfanato con áreas de recreación para los muchachos y niños; acondicionado de la mejor manera para cumplir con la legislación establecida y con el fin de satisfacer las necesidades básicas de los niños y jóvenes que viven en el orfanato. En el tiempo que tenemos acá (15 días) ya hay un muchacho nuevo; por lo que uno pensaría que el soporte debería de ser mayor, sin embargo es el mismo. Por día se invierten alrededor de $30 en alimentación y según se nos explicó se manejan becas de $50 por niño al mes, pero casi la mitad de los niños no están becados.
La pareja que administra este lugar tiene 32 y 27 años. Son bastante jóvenes, pero con un corazón grande por los niños. No niegan que algunas veces alguno de los dos ha pensado salir corriendo por lo cansado que se vuelve el trabajo; ellos requieren de voluntarios para continuar y esas es una de las peticiones en sus corazones.
Se está en proceso de solicitar una licencia para poder abrir una iglesia nueva en otra aldea, ya que sin esta se les es prohibido realizar tiempos de adoración (Camboya es un país budista, por lo que solamente con esta licencia pueden realizar celebraciones religiosas cristianas).
El primer lunes fue bastante intenso con los niños, tuvimos un tiempo a las 5am de devocional, dos tiempos de música, cantos, baile, juegos, tiempo de lectura bíblica; el calor y humedad también estuvieron presentes y es mucho mayor que el mes anterior.
Hemos estado realizando visitas a las aldeas, donde realizamos caminatas de oración o vamos a las casas de los miembros de la iglesia a orar. En algunas aldeas el acceso al agua no es fácil, por lo que deben de caminar con las cubetas al menos 200 metros para hacerla llegar a las casas, esto ya que existe cierta sequía en algunos lugares y los pozos están secos.
Durante una de las visitas a las aldeas, conocimos a este muchacho de 18 años, quien posee un cuerpo de un niño de 5 años. Él tiene dificultades para comer correctamente; su mamá, quien ya es una mujer mayor, algunas veces deja de alimentarlo ya que le cansa el tener que hacerlo o que el muchacho vomite lo que se come. Durante la segunda visita a este hogar, la mamá le pidió al Pastor que se lo llevara al centro de discapacitados en Phnom Penh. El proceso de trasladarlo requiere de gastos y tiempo, por lo que debemos continuar en oración por este joven.
Durante los tres primeros días estuvimos utilizando lo que llaman un tuk tuk para trasladarnos, sin embargo se arruinó y no hay reemplazo, por lo que estuvimos utilizando las motocicletas, hasta que hace tres días se nos hizo llegar un comunicado de que se nos es prohibido utilizar motocicletas para realizar ministerio; esto ya que el seguro que nos cubre, no responde por ningún accidente ocurrido en este tipo de transporte. Tratamos de buscar un tuk tuk que nos sirviera de taxi, pero nos cobró demasiado caro, por lo que no pudimos contratar el servicio; creo que como saben que somos extranjeros tratan de cobrar bastante más. Un tuk tuk nuevo cuesta alrededor de $2700; para que se den una idea de lo costoso que es eso acá les detallo el tipo de cambio, por $1 te dan 4015 Reil; la moneda está bastante devaluada y el lugar donde estamos es rural y de bajos recursos. Creemos y oramos por un milagro con respecto a esto. Esperamos en Dios que nuestro ministerio no se vea limitado por el carecer de un transporte adecuado para movilizarnos a las aldeas, que en moto durábamos alrededor de 15 a 20 minutos en llegar.
Con los niños hemos estado realizando también lecciones de inglés y un poco de educación en limpieza oral; gracias a Dios pudimos juntar un poco de dinero entre los del equipo y comprar cepillos de dientes y pasta para todos. Es parte de lo que aprendí hace muchos años: un evangelio integral.
Con respecto a los piojos, no hemos podido hacer mucho, ya que todos los niños duermen juntos y no hay manera de erradicar el problema a menos que le cortemos el cabello a todos. No hay productos para ayudar con este tema cerca tampoco. A veces, me es difícil comprender que hay cosas ante las que se puede hacer poco o nada; sin embargo he estado orando para un milagro en este sentido; yo creo que Dios de verdad puede hacer cualquier cosa.
Igualmente hemos podido pintar con murales bíblicos los exteriores del orfanato/iglesia y ya hoy los niños se han estado involucrando en esta actividad. Ha sido toda una aventura poder liderar esta actividad y descubrir o más bien redescubrir dones en mi vida y realizar un trabajo en equipo increíble.
Desde el primer martes comencé a enfermarme, un resfrío, gracias a Dios no era Malaria; todavía tengo un poco de tos y dolor de cabeza; mas Dios me ha sanado notablemente. Todavía hay algunos del equipo con un poco de resfrío y el Pastor Soly no está bien de salud.
A TRES DÍAS DE PARTIR LES DETALLO ESTO:
Se nos fue el mes y ya este sábado 27 de febrero, si Dios lo permite, salimos con rumbo a Vietnam. Tercer mes, tercer país. Dios realmente ha sido bueno y hemos podido seguir sirviendo y seguir siendo transformados por medio de su palabra.
Hemos podido seguir dando clases de inglés en el orfanato. Los martes tenemos lección bíblica, cantos y juegos también, los sábados hemos tenido deportes y los demás días tenemos lecciones de inglés y continuar pintando la iglesia y sus alrededores.
Cada uno ha ido descubriendo un poco más de lo que Dios le ha dado para servir en su reino y ha sido grandioso ver lo que nos ha mostrado y cómo ha ido dando seguridad a mis compañeros y a mí con respecto a ser utilizados para su gloria aún en los pequeños detalles.
Los chicos estas últimas dos semanas se han apegado más a nosotros y por lo tanto nosotros a ellos, lo que va a ser más dura la despedida; pero al final para eso estamos acá, para amarlos y mostrarles que pueden ser amados de maneras diferentes. Nos han estado haciendo cartas y detalles y nos piden que les escribamos nuestros nombres en los brazos de ellos…es como ser famoso jejeje… es increíble el cambio que un abrazo y un te amo puede ocasionar en la vida de ellos, es grandioso cuando regresan de la escuela que buscan los abrazos de nosotros y llegan con una sonrisa de oreja a oreja. Escuchar un gracias luego de darles lecciones de inglés o de darles la lección bíblica es más que gratificante para mi alma.
Dios me ha mostrado cómo amar, cómo ser sensible a su voz y amar aun cuando exista un final.
Dado que el tuk tuk salió de las carreteras y tenemos prohibido utilizar las motocicletas, la semana pasada fuimos caminando a la aldea más cercana, a 6km del orfanato bajo un calor de más de 30 grados centígrados… toda una aventura. De camino un señor de tez oscura cruzó la calle pidiendo que lo esperáramos, no podía hablar bien, tenía una abertura en su tráquea para poder respirar, y trataba de decirnos algo, pero no le entendíamos, nos pidió papel y lápiz y gracias a Dios uno de nosotros andaba. Nos contó con era francés y estaba buscando por alguien que le hablara en su idioma natal; lamentablemente ninguno del equipo habla francés. Le pregunté si podía orar por él, pero solamente dijo gracias y se regresó a su casa.
Luego visitamos una escuela, esta tiene 104 estudiantes y solamente 2 maestros. Pudimos orar por ellos y están necesitando un servicio sanitario para la escuela; así que también oramos por esto. Es increíble como una necesidad básica suplida puede volverse un milagro. En realidad nuestra vida misma la podemos contemplar en cada detalle como un milagro si así nos decidimos a hacerlo.
Cuando regresamos ese día al orfanato, nos encontramos con que a “Ginger” (así la bautizamos nosotros porque no tenía nombre), la perrita del orfanato la había atropellado un carro en la mañana, cuando acompañó a los chicos a la escuela. Estuvo muy mal los primeros 3 días, ya va mejorando. Tal vez se pregunte por qué le cuento sobre Ginger, así que le voy a explicar. Resulta que acá en Cambodia los animales no importan, así fue como se nos explicó; hemos estado enseñando con el ejemplo que toda la creación fue hecha por Dios y debemos cuidarla, así que ha sido un reto enseñar a los niños a cuidarla y tratarla bien ya que no puede moverse mucho; al parecer tiene la pata o la cadera quebrada o fisurada. Es hermoso ver cómo van mejorando y haberles pedido inclusive un día que oráramos por ella.
Al día siguiente uno de los niños no podía caminar bien, cuando lo revisé tenía el pie bastante inflamado, por lo que me preocupé. Pedí que lo lleváramos a doctor, aun cuando tuviera que salir de la bolsa personal no podía dejar que él estuviera mal si estaba en mi posibilidad ayudarlo. Le mandaron antinflamatorios y una crema. Gracias a Dios a hoy está súper bien y ya camina hasta con una sonrisa en su rostro.
Hemos podido servir, pero más allá de eso hemos sido más bendecidos que lo que creo hemos hecho.
Agradezco sus oraciones por lo que les mencioné en esta carta y por lo que les detallo:
- Finanzas: debo levantar un total de $5100 para el 29 de abril de 2016
- Salud: sigo con una tos bastante fea y el ciático se me ha estado inflamando
- Jornada espiritual: que sea Dios mostrándome su voluntad y lo que quiere modificar y mejorar en mi vida. Depender más en Dios
- Emocional: mi noviazgo y propiamente por mi novio Daniel y su viaje misionero de corto plazo a Rumanía. He estado extrañando mi casa (lo que llamamos mal de patria); así que necesito fortaleza para estar presente en esta jornada de vida.
- Familia: la salud de mamá y toda mi familia. Que cada miembro pueda buscarle cada día más. Por mi papá y su trabajo en Malawi, Africa
- Equipo: que Dios nos una y abra los ojos a su verdad todos los días
